Despidos abusivos en Básico Ediciones Deportivas, proveedora de contenidos de Onda Azul TV de Málaga

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Despidos abusivos en Básico Ediciones Deportivas, proveedora de contenidos de Onda Azul TV de Málaga

ondaazulEl Sindicato de Periodistas de Andalucía (SPA) condena y rechaza el despido de dos periodistas en la empresa Básico Ediciones Deportivas, S. L., que suministra de contenidos deportivos a la televisión municipal Onda Azul Televisión de Málaga. Dichos despidos se producen después de que sus trabajadores hayan rechazado en asamblea una propuesta por parte de la empresa para bajarles el sueldo y las condiciones de trabajo por debajo del convenio del sector, intento que viene realizando la empresa desde el pasado mes de octubre.

En las negociaciones que se llevaban a cabo desde entonces entre trabajadores y empresa con la mediación del SPA, los trabajadores habían propuesto reducir la jornada laboral en función de la reducción del sueldo que les trataba de imponer la empresa, a lo que la gerencia se negó. Básico Ediciones Deportivas ha cerrado el proceso de diálogo con estos dos despidos y con la amenaza de nuevas medidas si los trabajadores se niegan a rebajar sus condiciones salariales y laborales por debajo de lo que establece la normativa laboral.

logo_spaSe da la circunstancia de que la autoridad laboral le ha rechazado a Básico Ediciones Deportivas el expediente de regulación de empleo que había presentado, por no haber demostrado razones suficientes para su aprobación. Para el SPA, se trata de un caso intolerable de abuso empresarial bajo el pretexto de la crisis económica, y de un acto de represalia hacia los trabajadores por haberse negado a trabajar en condiciones de ilegalidad.

El Sindicato de Periodistas de Andalucía hace un llamamiento al alcalde, Francisco de la Torre, y al equipo de gobierno de la ciudad de Málaga para que no amparen bajo el paraguas de la televisión municipal casos de precariedad laboral ni abusos como éste, que según entendemos desde el Sindicato de Periodistas de Andalucía, pueden constituir, incluso, un delito contra los derechos de los trabajadores.

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