La Federación de Sindicatos de Periodistas (FeSP) expresa su rotundo rechazo a la propuesta que ha planteado la Unión de Televisiones Comerciales Asociadas (UTECA) de crear un único canal para las televisiones autonómicas públicas de toda España, sin publicidad.

Esta patronal de las televisiones comerciales no se conformó con conseguir que la publicidad desapareciera de RTVE y repercutiera en las cadenas privadas, y nunca ha ocultado su deseo de que tampoco emitan anuncios las autonómicas públicas. Su propuesta de un canal único no pretende mejorar el modelo de la televisión autonómica, como afirma, sino que esconde su interés por quedarse con toda la tarta publicitaria.

El futuro de las televisiones autonómicas públicas no pasa por su privatización, como pretende hacer el PP, sino por mantenerlas como servicio público eficaz, con una gestión adecuada, con la elección de sus directores y consejeros por el Parlamento de la comunidad autónoma y garantizando su neutralidad ideológica y su independencia del Gobierno de turno.

La Comisión Permanente de la Junta Ejecutiva Federal de la FeSP, reunida este fin de semana en Madrid, celebra que el Consejo de Administración de RTVE haya sido obligado a dar marcha atrás en su disparatado intento de controlar los informativos, y lamenta que solo haya dimitido uno de los nueve consejeros que hicieron posible su acuerdo.

La FeSP espera que esta decisión -frustrada finalmente gracias a la oposición de los trabajadores de RTVE y de los sindicatos de periodistas y otros colectivos profesionales y sociales- no sea una muestra del deseo de los partidos políticos por controlar la televisión pública en España, cuyo cambio ha sido lo único positivo en el área de los medios de comunicación que ha realizado en ocho años el Gobierno de Zapatero. La única manera de evitar cualquier futuro intento de control es regular por ley el derecho a la información de la ciudadanía y el papel que corresponde a los periodistas, como vienen reclamando la FeSP y otras organizaciones desde hace años.

La FeSP también denuncia la actuación ilegal que están llevando a cabo muchas empresas de comunicación, que extorsionan a los fotógrafos, cámaras y colaboradores que no son de plantilla, obligándoles a firmar por contrato que ceden a la empresa los derechos de explotación de sus obras para cualquier uso en cualquier país del mundo, por tiempo ilimitado y pudiendo venderlas a otras empresas. La FeSP pondrá estos hechos en conocimiento de la Federación Internacional de Periodistas (FIP), a la que pertenece, para que intervenga donde corresponda.

La Comisión Permanente de la Junta Ejecutiva Federal de la FeSP muestra su apoyo a todos los trabajadores que se ven amenazados por despidos y pide a los comités de empresa y delegados sindicales que, frente a los recortes de plantilla que quieren llevar a cabo las empresas, planteen otro tipo de recortes y un control de los gastos abusivos que los ejecutivos han llevado a cabo durante la época de beneficios.