El 20 de abril de 2009, con motivo de la regulación de los corresponsales, algunos directivos dijeron que era el último escudo humano antes de tocar a la plantilla. En los desayunos de Televisión Española la presidenta de la FAPE, Magis Iglesias, preguntó a la vicepresidenta del Gobierno socialista, María Teresa Fernández de la Vega, sobre la situación de EFE. Obtuvo la callada por respuesta.

Nunca en la historia de EFE, la FAPE, en un borrador interno difundido por “fallo técnico”, tuvo que recordar a la dirección de esta empresa que “en una situación de crisis económica como la que estamos viviendo y que afecta de lleno a los medios de comunicación, es cuando el Gobierno y el Estado deberían colaborar más que nunca en defensa del periodismo digno porque del depende la calidad de la democracia”.

El 20 de julio de 2009 Grijelmo decía, en un medio no sospechoso de ser de derechas, CincoDías: “EFE está financieramente bien, capaz de resistir la crisis.”

Con este titular, ¿cómo explica la dirección y el accionista la situación actual? Suponemos que la dirección no compró hipotecas basuras.

Ya sin “escudos humanos” que protejan a la plantilla y con unas finanzas por los suelos, – Grijelmo aseguraba lo contrario en Cinco Días- la dirección acude a la plantilla para que haga sacrificios salariales, en una oferta que tiene más de ultimatum que de voluntad negociadora.

Pero, por otra parte, la oferta fue planteada para que no fuera aceptada. No hay que olvidar que en EFE se está ejecutando un cambio estructural de su actividad periodística con el beneplácito del Gobierno, hecho que nos parece una aventura incierta.

Para llevar a cabo el “sacrificio salarial” la Dirección toma como punto de referencia las empresas privadas del sector donde ha habido rebajas salariales.

En ellas, el empresario se ha comprometido a asegurar el futuro a medio plazo, la merma salarial sirve para mantener los puestos de trabajo. En EFE la dirección actúa en ocasiones como empresa privada y en otras apela a la titularidad del Estado.

Los trabajadores de EFE creemos en la empresa pública y siempre hemos sabido que nuestros salarios difieren bastante de los de PRISA , Vocento, La Vanguardia, etc.

Queremos seguir ejerciendo nuestra labor pública y deseamos que cualquier medio de comunicación, por pequeño que sea, tenga acceso a la información, porque como ya se ha dicho de un periodismo digno depende la calidad de la democracia.

Los hechos antes expuestos nos llevan al paro convocado para el día 16.

De éste responsabilizamos a la dirección y al accionista porque no nos han brindado otra salida.

Para defender la libertad de información y el futuro de EFE pedimos al Gobierno que tome cartas en el asunto. O que aclare si está de acuerdo con las que se han puesto sobre la mesa.

Comité de Empresa de Efe Barcelona