Sognare, un sueño hecho realidad

Son tres jóvenes, Iván Centenillo, Víctor Segovia y Rafael Lara, músicos con un largo recorrido a sus espaldas a pesar de su juventud. Cada uno de ellos había iniciado ya su carrera en solitario y un día decidieron unir sus vidas y sus voces para hacer realidad un sueño, acompañados del piano de Salvador Fajardo.

Las redes sociales los pusieron en contacto y se fueron conociendo en lo profesional. Se admiraban por su forma de cantar y decidieron unirse para sacar adelante un proyecto único basado en la fusión del flamenco, el pop y el canto lírico. Cuentan con un público y unos seguidores fieles que los acompañan a conciertos y galas, que disfrutan de esa belleza en el escenario, de esas grandes canciones que, con su toque personal, son aún más bonitas. Y el público solo puede disfrutar y aplaudir.

Iván Centenillo, reconocido cantaor flamenco es trabajador social por el día y estudiante y cantaor por la noche, como otros tantos cantaores de flamenco. Los artistas de este género poco tienen que ver con aquellos otros que, de venta en venta, subsistían con  las monedas que recogían por su arte. Hoy en día todo eso ha cambiado. Los cantaores estudian, están preparados, saben idiomas, tienen sus carreras y alternan todos esos conocimientos con proyectos alternativos que se enriquecen musicalmente de otros géneros. Víctor Segovia, cantante pop, ha realizado versiones internacionales, ha formado parte de grupos y orquestas y tiene una extensa trayectoria profesional. Rafael Lara, tenor lírico, ha colaborado con orquestas sinfónicas con las que ha interpretado música sacra, ópera o zarzuela  y ha colaborado en bandas y coros siempre como solista.

– ¿Cómo deciden formar Sognare?

-Cada uno tenemos una carrera detrás pero, en un momento dado, decidimos formar parte de un nuevo proyecto. Nos ilusiona. Las tres voces son versátiles y a la hora de conjugar los temas entre los tres no ha habido ningún problema porque el timbre de voz de cada uno encaja muy bien .No tenemos ningún problema entre nosotros, nos llevamos muy bien y todo eso se nota. Nos reunimos en casa de Salvador, nuestro pianista y hacemos los ensayos allí. Preparamos nuestros temas cada uno por nuestra parte y luego allí encajamos los tres estilos. Nos gusta estar los tres juntos cuando preparamos nuestros repertorios individuales  y escucharnos los unos a los otros, dar nuestra opinión sincera en el ensayo.

-¿Creen que se pueden dedicar al cien por cien a la música y vivir de ella?

-Hasta ahora sí lo hemos hecho, de una u otra forma estamos vinculados con ella. Rafael, enseña y canta. Iván, además de ser trabajador social, compagina ese trabajo con la docencia para coros rocieros y algunas clases particulares de flamenco y por las noches más flamenco, y otros proyectos… Estamos todos muy vinculados con la música. Víctor ahora está centrado en este proyecto que, realmente, nos tiene a todos volcados. Desde la promoción hasta el control de las actuaciones y el papeleo, lo hemos llevado adelante nosotros. En este momento estamos más centrados en preparar nuestra música y hemos delegado en una persona para que se ocupe de la promoción y el tema administrativo.

– Son un grupo muy comprometido con causas solidarias, siempre que se les necesiten ¿les pueden encontrar?

-Sí, estamos muy comprometidos con problemas de niños enfermos, causas sociales, asociaciones o ONG´S. Para todo eso siempre pueden contar con nosotros.

– Sognare es un grupo apadrinado por artistas como Rafael Amargo, o José Manuel Zapata, patrocinado por la Universidad de Granada, con participación en el FEX, en teatros, el Ayuntamiento de Granada ha contado con ustedes para algunos actos, como por ejemplo los Premios Belenes 2015, han ofrecido conciertos en enclaves maravillosos como el Patio del Ayuntamiento, todo lo que han vivido en tan poco tiempo ¿lo habían soñado?

-Pues realmente, no lo habíamos pensado. Cada uno teníamos nuestras carreras, Iván cantando flamenco, Rafael y Víctor también con su música, nunca habíamos ni pensado que estaríamos en un proyecto donde habría un cantante pop y un tenor junto a un flamenco. Iván había hecho colaboraciones con otros tipos de música, pero nunca había pensado que este proyecto iba a ser una realidad. Y mucho menos que ese grupo iba a tener una repercusión como la que está teniendo, más que importante. En un principio, este proyecto era un espectáculo, unir nuestras voces para una o dos galas y nada más, por hacerlo diferente, pero desde el momento que empezamos a crearlo, ya sabíamos que iba a tener un buen resultado. De hecho, Sognare viene de eso, de soñar, era un sueño.

Villancico en Canal Sur

Componentes de Sognare durante la entrevista con Yolanda González./Chana Press.

-¿Cómo fue la experiencia en Canal Sur al ser los ganadores el año pasado del villancico y vídeo de Navidad en Canal Sur?

-Decidimos presentarnos y probar suerte, acabábamos de empezar y queríamos ver qué pasaba. Con la música de Salvador, las voces nuestras y también nuestros arreglos, hicimos el vídeo, la grabación y de fondo las maravillosas vistas de Granada, de la Alhambra que es Patrimonio de la Humanidad. Dimos el paso para que Andalucía nos conociera. Y fuimos el villancico ganador y formamos parte de esa campaña. Este año hemos participado también en la campaña de los deseos de Canal Sur y en directo cantamos de nuevo el Villancico.

– Echamos la vista atrás un poco y recordamos el 22 de mayo del año pasado cuando estrenaron  su espectáculo en el teatro José Tamayo de la Chana. Cartel de entradas agotadas desde días antes y un lleno absoluto. ¿Cuál es su recuerdo de ese día?

-Fue nuestra puesta de largo, sacamos todo lo mejor que teníamos dentro, invitamos a grandes profesionales como Curro Albaycin, la soprano Adriana Torres, la cantante Pop Esencia , Gloria Montes y los músicos Salvador Fajardo e Irene Morales y bailarines. Mucha alegría porque el teatro estaba lleno pero nos apenó pensar en las personas que se quedaron con las ganas de poder entrar y no pudieron hacerlo. Aunque después hayan podido venir a vernos en otros lugares. Nuestros recuerdos son variados, alegría de llenar el teatro y también estrés de preparativos, de cartelería,  atrezzo, montar y desmontar, todo lo hicimos nosotros. De hecho, no pudimos ni salir a saludar al público, por toda esa organización. Lo más positivo es que al público le gustó mucho el espectáculo, nuestra propuesta, y que aumentamos mucho nuestros seguidores en las redes sociales. Fue muy bonito, parecido a un parto, nueve meses de preparativos que dieron a luz ese día.

-¿Tienen conciertos fuera de Granada? ¿Volarán como jóvenes promesas granadinas fuera de aquí?

-Sí. Somos chicos de proyectos. Lo más cercano será un musical en Sevilla, Romeo y Julieta. Iremos como grupo a desarrollar el musical pero sin perder nuestra esencia de Sognare. Y con ellos iremos por muchas capitales de España, Madrid, Valencia…. Estamos también preparando el aniversario del estreno, donde vamos a sacar un single. Saldremos pero siempre volveremos.

– ¿Cuál es el objetivo de Sognare?

-El objetivo es que personas que no hayan escuchado flamenco, lírico o pop, puedan hacerlo.  Acercar los tres géneros al público en una sola actuación. Ese era nuestro objetivo inicial. A día de hoy tenemos otros objetivos distintos. Ya no sólo acercarles los tres géneros en una actuación, sino con canciones inéditas en un disco. Somos un grupo, pero luego cada uno sigue manteniendo su identidad, somos Sognare pero seguimos siendo Iván Centenillo cuando me subo a un tablao flamenco y canto, o Rafael Lara con su lírica o Víctor Segovia con su pop. Nos gusta mantenernos al margen cuando alguno de nosotros hace su carrera en solitario. Pero también nos gusta que nos identifiquen como los de Sognare, porque es un proyecto nuestro y es como un hijo. Ha sido todo tan rápido, que a veces tomamos decisiones en el momento. O decidimos el camino a seguir tras un concierto o una gala. En función de cómo han ido surgiendo las cosas hemos ido viendo cómo vamos a seguir.

Hay que moverse

-¿En este momento, cómo ven el panorama cultural en Granada?

-Pues creemos que Granada es una ciudad que lo tiene todo y nadie valora nada. No luchamos por nuestras cosas. Si por ejemplo, hablamos de infraestructuras podíamos tener más de las que tenemos, pero luego los granadinos de a pie no somos una sociedad que reivindique. Cuando nosotros hemos realizado algún concierto, hemos ido a las Administraciones y te dicen que no hay dinero pero te ceden el teatro, por ejemplo. Hemos tenido esa facilidad, pero también hay que implicarse un poco. El artista tiene que trabajar. Si quieres hacer un concierto, ellos te ceden el espacio y si luego ya no te mueves, no puedes culpar al público porque no haya venido a verte. Si la gente no sabe que había un concierto no va a ir. No te puedes encontrar todo hecho. Hay que trabajarlo. El artista tiene que moverse. Hay que llamar a puertas para darte a conocer. Es cierto que, a veces, no saben qué hacer o a qué puerta llamar. Está la iniciativa propia de moverte y de hacer una propuesta. Buscarte la vida. Tenemos que implicarnos todos más. Hay plataformas para muchas cosas y siempre son minoritarias. Tenemos el ejemplo con vosotros. Hay medios de comunicación en Granada, pero por el motivo que sea no se hacen eco de lo que pasa en La Chana, entonces un grupo de personas con inquietudes ha creado un medio para ponerlo al servicio de los demás. A lo mejor te dan ayudas o a lo mejor no, pero si tú crees en lo tuyo ya te buscarás la financiación. Nosotros hemos trabajado mucho con patrocinadores, con iniciativa privada. Tienes que llevar un proyecto y a raíz de ahí te podrán valorar. Nosotros no hemos tenido ningún problema con la Administración. En Diputación nos introdujeron en el catálogo y a raíz de ahí, nos contrataron para actuaciones porque los solicitaban los ayuntamientos o asociaciones de comerciantes, por ejemplo, o con el Ayuntamiento de Granada  a través de la Concejalía de Bienestar Social, o la Universidad. El artista tiene que ir con una predisposición y un proyecto  y te queda la satisfacción personal de saber que lo que estás haciendo es lo que te gusta. Y ser feliz, que es lo más importante. Disfrutar de lo que estás haciendo. Estamos muy agradecidos a la sociedad y a las administraciones, a los medios de comunicación, todos con nosotros se han portado muy bien.

-¿Cómo ven su futuro más cercano, musicalmente hablando?

-Estamos en un momento de búsqueda. Nos encaminados hacia un nuevo proyecto musical con el apoyo de personas que crean en nosotros, se llama crowdfunding , es una campaña donde cada persona puede hacer una aportación.  Nosotros sacamos adelante nuestros proyectos y ellos se ven beneficiados obteniendo algo a cambio, dependiendo de esa aportación. A medio plazo nos estamos implicando en un nuevo proyecto de temas nuestros, dejando un poco a un lado las versiones. Hemos estado recientemente en Madrid buscando autores, escuchando canciones. Queremos sacar un producto que esté hecho a la medida de cada uno de los tres y en conjunto. Por ahora, queremos seguir con nuestra autoproducción , no sabemos lo que ocurrirá en un futuro, si alguna discográfica nos podrá ofrecer algo interesante. Pero por ahora, no es nuestro objetivo. Nuestro futuro está en potenciar la novedad de éste formato. Nuestro estilo es baladista y queremos seguir con él. Transmitir con las canciones sentimientos, amor y desamor. Somos cantantes, no somos profesionales de la industria musical, ni del marketing. Ahora estamos buscando alguien profesional que ejecute este producto. Si queremos una carrera profesional tenemos que rodearnos de un equipo profesional. En eso estamos, y entusiasmados porque un fotógrafo de un gran nivel ha querido hacernos las fotos para el nuevo trabajo.