Plan de Eficacia, Eficiencia y Racionalización de la RTVA para 2021

LUCES Y SOMBRAS DE UN PLAN IMPRECISO (DE AUTORÍA INTELECTUAL BICÉFALA)

El Plan de Eficacia, Eficiencia y Racionalización de la RTVA para 2021 aprobado por el consejo de Gobierno el pasado 30 de marzo en cumplimiento de la Ley de Presupuesto de la Comunidad Autónoma de Andalucía para 2021, contiene algunos aspectos positivos y otros confusos e incluso negativos, no sólo para la RTVA sino también para el sector audiovisual andaluz. Y sobre todo tiene inconcreciones y contradicciones que de llevarse a cabo pondrán muy difícil la viabilidad futura de la Radio Televisión Pública de Andalucía, porque la abocan a sobrevivir en condiciones de infrafinanciación, o lo que es lo mismo, a sobrevivir administrando la penuria. Una RTVA ambiciosa y competitiva en el actual panorama audiovisual requiere un esfuerzo financiero, tecnológico y de recursos humanos que en este “Plan de Eficiencia” no aparecen diseñados con nitidez. El documento sí recoge un amplio abanico de aspectos, que van desde la renovación de personal -bolsas de trabajo, oposiciones, contratos relevo- hasta estrategias de expansión comercial a nuevos mercados, redes sociales e incluso difusión y crecimiento en Iberoamérica.

Aspectos que en principio suenan bien, y esa es la cara de este Plan de Eficacia. La cruz es que plantea hacerlo con reducción presupuestaria y con disminución mediante amortizaciones de una plantilla que ya se encuentra esquilmada y al límite. Las medidas en él contempladas serán sometidas a control y evaluación trimestral. Analizamos aquí los aspectos más relevantes del documento: 

Capítulo 1: Actuaciones en materia de personal. Si algo tiene el llamado “Plan de Eficacia”, que se redacta como “profundización” del Contrato Programa y de la Carta de Servicio Público de Canal Sur, es el reconocimiento de las carencias en inversión y la no reposición de personal desde 2012 (desde entonces Canal Sur supera los 300 trabajadores menos): “Vienen experimentando -dice- las consecuencias de una falta de reposición de personal necesario para la prestación del servicio público que tiene legalmente encomendado en el Estatuto de Autonomía”. También reconoce que como consecuencia de ello “el personal del grupo viene acometiendo un relevante esfuerzo”, gracias al cual se ha podido cubrir el servicio con menos personal, y abrir una tercera línea de actividad, Canal Sur Media, de servicios digitales en soportes web y redes sociales. Y además, manteniendo la estructura de implantación territorial en toda Andalucía.

Todo un alarde, que se lleva a cabo con menos personal, lo que conduce a sus autores a reconocer que los trabajadores han realizado “un relevante esfuerzo de prestación de servicio”. Abundando en esta verificación, señala el documento que esta ampliación de servicios realizada con una reducción paulatina del personal supone “un genuino esfuerzo de eficacia y eficiencia así como de racionalización en el uso de recursos”. Estamos ante un reconocimiento expreso de lo que ya venimos denunciando los sindicatos hace tiempo: plantilla y recursos técnicos están al límite desde hace años. Y como muestra aquí va un dato relevante, que aportamos: en 2019 se realizaron 20.000 horas extras, sin las cuales habría sido imposible sacar el trabajo adelante. Horas que al descansarse en tiempo doble suponen delimitar aún más la plantilla real. Se agradece por tanto esta inmersión -aparentemente momentánea- del redactor o los redactores del documento en la realidad laboral y profesional de la RTVA. 

Reconoce el plan que la puesta en marcha de la unidad Media de servicios ha creado vacantes no cubiertas. Lo que se ha hecho con un “ingente esfuerzo” y gracias a las sinergias de la plantilla, la disposición del personal en funciones diferentes y de superior categoría, y la formación en nuevas competencias. La puesta en marcha de Canal Sur Media, añade, requiere “un crecimiento exponencial de personal adscrito”.

Plantea por ello le necesidad de un aumento de personal, tanto en la “Unidad Media”, como en los servicios de radio y televisión, especialmente en los centros territoriales, y en el resto de departamentos. Y propone ordenar los flujos de trabajo, elaboración de un estudio bianual de necesidades de personal, ampliar “de forma significativa” el personal adscrito a Media Canal Sur mediante movilidad de la plantilla, y la dotación de las vacantes que se vayan produciendo en Radio y Televisión como consecuencia de esta movilidad. Así, prevé:

  • Jubilaciones parciales mediante contratos relevo, para lo que se renovarán las bolsas de trabajo externas.
  • Medidas de movilidad, aplicando el reglamento de la Mesa de Contratación y atendiendo a lo previsto en el Convenio Colectivo.
  • Oferta de Empleo Público, “en relación a aquellos puestos que sean necesarios” para posibilitar un óptimo cumplimiento de los objetivos contemplados en el Contrato Programa. Recordamos que la última fue convocada en 2008.

Pero junto a estas medidas citadas, contempla (en el apartado 6.2), y esta es una de las grandes dudas que deja sin resolver, la amortización de plazas, ya que remite a la nefasta Adicional 27 de la Ley 3/2020, que fija el Presupuesto de la Junta de Andalucía para 2021, fruto del pacto de gobierno de los partidos que sustentan al Gobierno andaluz. En ella se contempla “la amortización de las plazas que resultaran vacantes por jubilación”. Y aquí surgen varias preguntas que el documento no aclara:

  • ¿Se van a convocar oposiciones para cubrir nuevas plazas en Canal Sur Media y a la vez se amortizan otras en los mismos departamentos?
  • Si Canal Sur Media se nutre de traslados de las redacciones Radio y Televisión ¿se van a cubrir las vacantes que se creen por traslado a Media y no aquellas producidas por las jubilaciones, con lo que ello significará de reducción de personal a corto plazo en las redacciones actuales? Hay que recordar que la edad media de la plantilla está en torno a los 55 años y en muy poco tiempo van a ser muchos los compañeros que se jubilen, lo que supondrá, según este planteamiento, nuevas restricciones de personal. Y ello equivale a un ERE encubierto.

Conviene destacar un dato llamativo. En la partida de personal del presupuesto no se había incluido la subida salarial del 0.9% contemplada para todo el sector público andaluz. Incremento que se piensa ahora asumir desde el grupo RTVA con los posibles ahorros derivados de las jubilaciones (y cuyas plazas tiene previsto amortizar).

Tampoco contempla el documento ninguna referencia sobre cómo repercutirán todas estas medidas al personal temporal que espera una solución a esta situación abusiva de temporalidad.

Las aquí descritas son algunas de las bondades y contradicciones (seguiremos relatando) que contiene el documento del “Plan de Eficiencia”, que parece querer integrar, en una cohabitación imposible, dos visiones opuestas de lo que tiene que ser en el futuro la Radio Televisión Pública de Andalucía. Como si se hubieran trasladado al mismo los modelos distintos, y a veces opuestos, de los socios del Gobierno andaluz.

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